El Belén de Nuestra Madre se monta semana a semana
El Belén de Nuestra Madre de las Angustias de Zamora se monta este 2020 a pie de calle y semana a semana. Una historia de adviento compartida con todos los zamoranos y zamoranas.
Este atípico año, el Belén de la Real Cofradía Nuestra Madre de las Angustias es, si cabe, mucho más especial. Debido a las circunstancias actuales por la crisis sanitaria de la Covid-19, la Cofradía ha decidido situar su belén a pie de calle. El objetivo es evitar aglomeraciones y que todos los ciudadanos y visitantes que se acerquen a la ciudad puedan disfrutar de la exposición navideña sin ningún riesgo.
Pero, además de a pie de calle, en esta Navidad tan diferente, el Belén se irá montando semana a semana. Todo el que se acerque hasta el escaparate de La Rosa de Oro, ubicada en la calle Viriato de Zamora, será testigo de cómo avanza el montaje.
Una historia de adviento, desde el 26 de noviembre al 6 de enero en el Belén de Nuestra Madre
‘Una historia de adviento’ es el nombre elegido para el Belén de Nuestra Madre. Una historia que comienza en la primera semana de adviento para llegar hasta el nacimiento de Dios.
La Real Cofradía de Nuestra Madre de las Angustias de Zamora irá modificando el escaparate para montar el Belén ante los ojos de zamoranos y turistas.
La cofradía zamorana busca así, semana a semana, recorrer el camino que “nos va preparando para la Navidad». Un camino que prepara el exterior pero también el interior para vivir en todo su esplendor la Navidad.
Primera Semana: Amor
La leyenda que reza en el escaparate es la siguiente:
“Dios vino y viene por amor, amor a cada uno de los hombres y mujeres de este mundo. Y quiso nacer en una familia, la más alta definición del amor. El amor es lo invisible que mantiene el mundo girando, dice una canción, y es cierto, porque por amor se perdona, gracias al amor no se pierde la esperanza y por amor la solidaridad aparece. Es la primera palabra de nuestra historia de adviento porque es la que aglutina todas las demás, el amor es lo que nos mueve a un encuentro con el Señor que viene y quiere nacer en nuestros corazones, el músculo por excelencia asociado al amor”.
Segunda Semana: Esperanza
En el escaparate donde la Real Cofradía de Nuestra Madre de las Angustias de Zamora monta su Belén se puede leer lo siguiente:
“La esperanza es lo que nos mantiene vivos, lo que hace que permanezcamos alerta, pues hay más allá de lo que aparentemente vemos. Cuando un bebé llega a una casa la llena de vida, la llena de esperanza. Pues algo tan frágil como es un niño se convertirá en algo mucho más fuerte con el paso del tiempo. Así viene Jesús, con la fragilidad de un niño, pero el amor de todo un Dios. La esperanza está unida a la fe, pues creemos en el que viene, esperamos en él, en que algo tan insignificante como es un niño en pañales nos de la salvación.”
Tercera Semana: Perdón
Cambio en el escaparate en esta tercera semana de adviento dedicada al perdón.
El perdón es como una goma de borrar, gracias a él podemos eliminar lo que hemos hecho mal y comenzar de nuevo. Pero, al igual que la goma deja marca de lo escrito anteriormente, así la falta deja marca en nosotros, y es Dios el que por su misericordia, si nos arrepentimos sinceramente, elimina toda marca. Es tiempo de hacer examen de conciencia y borrar toda falta, preparándonos para recibir al Dios del perdón, pues cuando le preguntaron que cuánto había que perdonar Él dijo que hasta 70 veces 7, es decir, siempre. El perdón es un regalo que Dios nos da, y del cual nosotros también tenemos que hacer uso para con los demás.
Cuarta Semana: Solidaridad en el Belén de Nuestra Madre
El mundo necesita de personas que sepan unir, no dividir. Todos somos hijos del mismo Padre, todos estamos en este mundo y tenemos derecho a vivir dignamente. Hay que posibilitar que cada hombre y mujer tenga lo necesario para vivir, y más en estos momentos que estamos viviendo. Muchas veces con quitarnos un poco de eso que tenemos y compartirlo, podemos hacer que los demás puedan vivir un poco mejor. Es momento de que el amor por los demás, incluso por los que no conocemos, se haga visible, no ante ellos, sino ante Dios, y Él que ve en lo escondido lo recompensará.
Y la historia termina con este Belén montado con tanto cariño. Una exposición que te recomendamos acercarte a ver para apreciar los detalles de la muestra.
