Puerta de Doña Urraca: Zamora y su leyenda
Protegida por dos torreones, la Puerta de Doña Urraca en Zamora acoge diariamente a ciudadanos y visitantes que pasan por ella. Un impotente monumento que fue conocido también como Puerta de la Reina o Puerta de Zambranos.
La Puerta de Doña Urraca fue levantada en el siglo XII y se caracteriza, además de por su arco de medio punto, por la leyenda y el romance que desprende pero…
¿Quién fue Doña Urraca?
Vamos a hacer un viaje en el tiempo y remontarnos hasta el año 1065. El rey Fernando I acaba de morir y son sus hijos quienes heredan sus territorios. El mayor de todos, Sancho, se alzaría como rey de Castilla. El segundo de sus vástagos, Alfonso VI, se proclamaba rey de León. Mientras que el más pequeño, García reinaría las tierras gallegas.
Pero el rey también tenía dos hijas, Urraca y Elvira ¿Qué paso con ellas? ¿Recibieron algo tras la muerte de Fernando I?
Así lo explica el Romancero Viejo:
Morir vos queredes, padre, San Miguel vos haya el alma; mandastes las vuestras tierras a quien se vos antojara: a don Sancho a Castilla, Castilla la bien nombrada; a don Alonso a León, y a don García a Vizcaya. A mí, porque soy mujer, dejáisme desheredada. Irme yo por esas tierras como una mujer errada, y este mi cuerpo daría a quien se me antojara: a los moros por dineros y a los cristianos de gracia, de lo que ganar pudiere haré bien por la vuestra alma. Alli preguntara el rey: -¿Quién es esa que así habla? Respondiera el Arzobispo: -Vuestra hija doña Vrraca. -Calledes, hija, calledes, no digades tal palabra, que mujer que tal decía merece de ser quemada. Allá en Castilla la Vieja un rincón se me olvidaba, Zamora había por nombre, Zamora la bien cercada; de una parte la cerca el Duero, de otra, peña tajada; del otro la morería. Una cosa muy preciada, quien os la tomare, hija, la mi maldicion le caiga. Todos dicen amen, amen, sino don Sancho, que calla. Romance de Doña Urraca Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes
Un romance en el que, además de la imperiosa belleza de Zamora, se ofrece un reflejo de lo que se vivió en tierras zamoranas.
Sancho incumpliría los deseos de su padre en el reparto de reinos y Doña Urraca gobernaría en Zamora. Tras declarar la batalla a todos sus hermanos, comenzaba la historia de la resistencia de Zamora frente a las tropas del rey Sancho II. Zamora, “la bien cercada” sería asediada durante más de siete meses hasta que Vellido Dolfos acabaría con la vida de Sancho II (pero esa es una historia que ya te hemos contado aquí).
También se cuenta en el Romancero que en la conocida hoy como Puerta de Doña Urraca, junto a la que tenía su palacio, se reunió la reina de Zamora con El Cid quién le invitó a que cediese al asedio de su hermano Sancho. Una propuesta a la que Urraca respondería con estas palabras según el romancero:
Afuera, afuera, Rodrigo, el soberbio castellano acordásete debría de aquel buen tiempo pasado cuando fuiste caballero en el altar de Santiago, cuando el rey fue tu padrino, tú, Rodrigo el ahijado; mi padre te dio las armas, mi madre te dio el caballo, yo te calce las espuelas porque fueses más honrado; pense casar contigo, mas no lo quiso mi pecado, casástete con Jimena, hija del conde Lozano con ella hubiste dinero, comigo hubieras Estado, porque si la renta es buena, muy mejor es el estado. Romance del Cid Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes
Leyendas a parte, la Puerta de Doña Urraca es uno de los rincones imprescindibles de la ciudad de Zamora en los que hay que alzar la vista para maravillarse del legado que hoy conservamos.
Se os ha colado un pequeño fallo de nada. Zamora jamás fue parte de Castilla, ni de la vieja no de la nueva. El poema original dice:
Allá en tierra leonesa un rincón se me olvidaba,
Zamora tiene por nombre, Zamora la bien cercada,